CARACAS/HOUSTON – La estatal PDVSA ha empezado a negociar en privado la emisión de varios instrumentos financieros para saldar facturas pendientes con empresas petroleras, dijeron siete fuentes conocedoras de las conversaciones, complicando las finanzas de la compañía que enfrenta abultados vencimientos de bonos en los próximos meses.
Petróleos de Venezuela (PDVSA) emitió al menos 310 millones de dólares el año pasado en instrumentos financieros -como pagarés y notas de crédito- que entregó a empresas como General Electric buscando evitar que firmas que soportan su actividad petrolera reduzcan sus operaciones.
Los instrumentos que negocia a corto y mediano plazo fijan una fecha límite para cancelar las deudas, algunas demoradas por hasta seis años. De no ser honradas, se abriría una puerta para pleitos legales y embargos de activos, apuntaron las fuentes.
“PDVSA ha estado ofreciendo la figura de pagarés, así como otros tipo de instrumentos financieros para saldar sus deudas”, dijo una fuente familiarizada con las negociaciones. “Si PDVSA no paga, las firmas pueden ir contra sus bienes, embargarlos”.
En momentos en que el flujo de caja de la petrolera se ha reducido drásticamente por el desplome de los precios del petróleo, los vencimiento de los nuevos instrumentos pueden coincidir con abultados pagos de deuda del estado venezolano y su principal empresa estatal, PDVSA.
Por ejemplo, una empresa petrolera recibió un pagaré que vence tan pronto como en diciembre, justo luego que PDVSA debe cancelar unos 3.300 millones de dólares a tenedores de bonos, dijeron las fuentes. En abril enfrenta otro compromiso similar.
Además, PDVSA mantiene negociaciones para emitir unos 1.500 millones de dólares en notas con plazos de tres a cinco años, con las que pagaría deudas a sus proveedores, informaron tres fuentes conocedoras de las propuestas.
Reuters no pudo conocer el volumen de los títulos que ha emitido hasta ahora PDVSA en estas colocaciones privadas. La firma estatal tampoco respondió a solicitudes de más información.
PDVSA SIN EFECTIVO
La gigante estatal ha trabajado con bancos internacionales como Deutsche Bank para estructurar este tipo de emisiones privadas, dijo un operador que vio una propuesta de esa institución el año pasado. El banco europeo no respondió a una solicitud de Reuters de más información.
Las socias privadas de PDVSA y sus proveedores de servicios, se han mostrado más dispuestos a estas opciones de pagos, una vez que la estatal suspendió los pagos en efectivo en el 2015.
“PDVSA está en sequedad de pagos, en especial las facturas en dólares, desde hace al menos seis meses”, agregó otra fuente involucrada en una de las operaciones.
Proveedores como Schlumberger, la principal empresa de servicios petroleros en el mundo, empezó a recortar operaciones en el país por falta de pagos. Halliburton anunció una medida similar sin explicar los motivos.
El último reporte financiero de PDVSA indica que las cuentas por pagar a proveedores alcanzan los 20.837 millones de dólares al cierre del 2014. Las fuentes advierten que un tercio de ese monto es deuda en dólares y el grueso en bolívares.
PDVSA, que desde 2008 comenzó a retrasar el pago a proveedores, canceló con bonos a empresas de servicios, según indicó en su último reporte financiero disponible.
Pero la petrolera decidió detener sus emisiones públicas por costosas, y optó por ofrecer en privado este tipo de instrumentos financieros. Según las fuentes consultadas por Reuters, estos papeles son más difíciles de vender que los bonos globales al no estar registrados en sistemas de compensación como Euroclear y ser menos líquidos.
MÁS ACREEDORES
Sin embargo, este tipo de títulos permite a los portadores acudir a la justicia para solicitar embargo de activos, si no se les cancela al vencimiento, aseguraron las fuentes que pidieron reservar su nombre por no estar autorizadas a declarar.
Incluso, uno de los instrumentos emitidos el año pasado contempla la posibilidad de resolver cualquier disputa ante la Cámara Internacional de Comercio, a donde han acudido algunas firmas que mantienen arbitrajes internacionales con Venezuela.
Hasta el 2020, el Estado venezolano y su principal fuente de ingresos, PDVSA, deben cancelar 30 por ciento de la deuda externa que vence en los próximos 23 años.
El mercado calcula que existe un 97,1 por ciento de probabilidades de que PDVSA caiga en incumplimientos en los próximos cinco años, según datos de Thomson Reuters sobre el costo de asegurar sus títulos de deuda. Pero el gobierno socialista, que ha honrado todos sus compromisos de deuda externa, ha garantizado en reiteradas oportunidades los pagos.
Estos nuevos títulos que reciben las empresas petroleras son más difíciles de revender que los bonos de PDVSA, aunque una fuente del mercado financiero local dijo que algunos bancos que han participado en las conversaciones, ofrecen la opción de recomprar los papeles.
Aún así, algunos operadores calculan que las empresas petroleras podrían quedarse sin cobrar en efectivo al menos la mitad de lo que PDVSA les debía.
“La quita será enorme”, afirmó una fuente involucrada en estas negociaciones.
Reuters