El muro que mostró ser atrás los ‘All Whites’ en Wellington hoy se vino abajo con la velocidad de Farfán, Advíncula y Polo, la picardía de Cueva y Flores y la inteligencia de Flores y Trauco.
La ‘Bicolor’ ya había avisado con un disparo al travesaño de Advíncula y varios centros peligrosos desde ambas bandas que había respondido bien el portero Marinovic. Pero el grito de gol no tardó en llegar, y merecidamente.
Contra del equipo nacional, trancisión rápida por la izquierda que dejó en un duelo individual a Cueva con Reid. El jugador del Sao Paulo hizo lo que quiso en el central, se tomó su tiempo y habilitó a Farfán (27′) que llegó desde atrás. La ‘Foquita’ la controló y sacó un misil que dejó sin chances a Marinovic. El estadio se vino abajo.
La celebración no solo fue de desahogo, sino también se acordó de su amigo Paolo Guerrero y celebró con la camiseta del ‘9’ en medio de lágrimas. Emotivo momento.
La segunda parte inició con un poco de susto pero todo pasó cuando Christian Ramos (65′) cogió un balón suelto en el área chica tras un tiro de esquina a favor y la mandó a guardar. 2-0 y el Mundial se veía cada vez más cerca.
Nueva Zelanda tuvo un pasaje de rebeldía y metió en problemas a la ‘Bicolor’ pero rápidamente Ricardo Gareca movió el banco. Yoshimar Yotún ingresó para tener la posesión, seguido por André Carrillo y Adrián Zela para las pelotas aéreas.
El marcador no se movería más y tras los cuatro minutos de tiempo agregado por el árbitro la euforia se apoderó de todo el Perú. De los jugadores, comando técnico, de los miles de hinchas en el estadio y millones alrededor del país. Este grupo, que logró quitar la palabra “imposible” del vocabulario, logró el objetivo después de un sin fin de adversidades.
En un 2017 donde estuvimos invictos (10 partidos sin perder) lo cerramos con la clasificación al Mundial de Rusia 2018 donde regresaremos a la élite del fútbol a nivel de selecciones. Perú, estás entre los mejores del mundo.