Ni las negociaciones ni la tregua son delito dice Fiscal Douglas Meléndez

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El fiscal general de la República, Douglas Meléndez, confirmó esta tarde que el Ministerio Público giró 21 órdenes de captura contra igual cantidad de personas vinculadas con la tregua de pandillas, entre ellos, el exmediador Raúl Mijango y el exdirector de Centros Penales, Nelson Rauda, quien fungió durante el gobierno del expresidente Mauricio Funes. Paolo Lüers no figura entre las personas para las que se dictó orden de captura.

Meléndez informó además que la Fiscalía iniciará una investigación para determinar qué ocurrió con dos millones de dólares de las tiendas de Centros Penales que desaparecieron, y cuya responsabilidad tuvo que asumir el Estado quien tuvo que pagar a los proveedores de dichas.

“Se dio malversación de fondos de actividades especiales generadas por las tiendas de centros penales por un monto de dos millones, dijo Meléndez al anunciar que se iniciará una investigación para determinar si esos dos millones fueron utilizados o fueron repartidos entre pandilleros y funcionarios”.

El fiscal Meléndez dijo que los resultados de la investigación indican que “funcionarios y empleados públicos se valieron de sus cargos para cometer delitos”, y además, se promovió el fortalecimiento y expansión de las pandillas dentro de los territorios.

El titular del MP dio a conocer que el jueves pasado le fueron entregadas “en sus manos” al director de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto, 21 órdenes de captura en contra de varias personas señaladas por haber participado en la tregua con pandillas en 2012. Sin embargo, Douglas Meléndez anticipó que en su opinión ni la tregua ni las negociaciones pueden ser consideradas como delito o sea que no existe lo que en materia penal se conoce como hecho generador.

Con la anterior aseveración, en el sentido de que ni las negociaciones ni la tregua constituían delito con anterioridad, queda abierta la puerta de la impunidad para aquellos altos funcionarios que tuvieron que ver con la tregua. El Fiscal aseguró que solo después que se aprobaron las reformas actuales algunas de esas actividades podrán ser consideradas como delito.

Meléndez dijo que, por el momento, solamente tienen pruebas concretas contra 21 personas, pero que la investigación queda abierta para determinar si hay más personas involucradas.

Señaló que en el proceso de investigación figuran el exministro de Seguridad y actual ministro de la Defensa, David Munguía Payés; el columnista Paolo Lüers, y el padre Fabio Colindres, quien también fungió en algún momento como mediador.

Además, añadió que “hay indicios que desde la institucionalidad se estaba cooperando con el proceso de la tregua”. Según él, han tratado de hacer imputaciones a otras personas y funcionarios pero “posiblemente por el nivel de empoderamiento de estas personas no hemos logrado, nadie quiere declarar”.

El Fiscal hizo un llamado implícito a los capturados a colaborar con información que lleve a la captura de quienes les ordenaron cometer los delitos de los que se les acusa  “A lo mejor entre las personas detenidas hay alguna cooperación para decir quién está más arriba y de quién recibieron órdenes”, dijo Meléndez.

Según la Fiscalía, el MP tiene suficiente prueba documental para demostrar (la ilegalidad de) los beneficios otorgados a los pandilleros y sus cabecillas durante la tregua.

“Se promovieron beneficios penales a los reos, como prostitución, introducción de objetos prohibidos, se instaló televisión con cable, se usaron recursos del Estado en la promoción de la tregua. El inspector general de Centros Penales recibió fondos de las tiendas de los centros penales para movilizar el aparataje de la tregua”, señaló el fiscal.

Meléndez detalló de manera pormenorizada la forma en que los pandilleros introducían juegos de video, como Play Station, calentadores de agua y otros electrodomésticos.

Una colaboradora del Fiscal detalló igualmente cómo en sus fiestas los pandilleros ingresaron la banda musical Sonora Dinamita, en Ciudad Barrios, en diciembre de 2012 permaneciendo en penal hasta por cuatro días. También ingresaban bailarinas, algunas de las cuales fueron víctimas de abuso sexual, en ese mismo mes, dijo la colaboradora.

Como dato curioso se relató cómo de la pastelería Antony ingresaron 32 pasteles solicitados por los pandilleros. En otra ocasión, Roberto Díaz y Carlos Marinero Aquino ingresaron nueve televisores plasma en junio de 2012. También tienen el registro del ingreso de 1605 cajas de Pollo Campero, “una cantidad exorbitante”, según la FGR.