En su cuenta oficial de Twitter, el presidente electo de El Salvador, Nayib Bukele, criticó a los presidentes de Honduras y Nicaragua, Juan Orlando Hernández y Daniel Ortega.
Bukele escribió de manera retórica, “¿cuál es la diferencia entre Hernández y Ortega?”, y agregó: “Uno se dice de derecha, el otro de izquierda. Pero la realidad es que ambos están en el poder a la fuerza, a costa de muchos muertos y sin legitimidad democrática”.
Parece que la narco dictadura de Honduras teme por la erosión de su apoyo en Estados Unidos.
Hace bien. Pues tener un hermano preso por narcotráfico no le ayudará en sus pretensiones políticas a futuro.
— Nayib Bukele (@nayibbukele) April 5, 2019
¿Cuál es la diferencia entre Hernández y Ortega?
Uno se dice de derecha, el otro de izquierda.
Pero la realidad es que ambos están en el poder a la fuerza, a costa de muchos muertos y sin legitimidad democrática.
La lucha de nuestros pueblos hermanos es también la nuestra.
— Nayib Bukele (@nayibbukele) April 5, 2019
Bukele extendió su crítica al gobierno Hondureño. “La narco dictadura de Honduras teme por la erosión de su apoyo en Estados Unidos. Hace bien. Pues tener un hermano preso por narcotráfico no le ayudará en sus pretensiones políticas a futura”, publicó.
El motivo de estos comentarios críticos de Nayib Bukele en Twitter no se conocen. Aunque el miércoles, el secretario de la Presidencia del gobierno de Honduras, Ebal Díaz, publicó en su cuenta de Twitter reportes de medios locales de un supuesto pacto entre Bukele y pandillas salvadoreñas cuando el presidente electo era alcalde de San Salvador, acuerdos que Bukele ha negado.
Díaz agregó que “en Honduras regularmente se capturan a mareros y pandilleros de El Salvador, por ello, es importante el compromiso de todos los los líderes de la región en atacar las bandas criminales, las maras y pandillas”.
En este momento FUSINA traslada 12 mareros altamente peligrosos de Támara a cárceles de máxima seguridad que antes se dedicaban a extorsionar y mandar a matar gente inocente. Estos individuos antes intocables y ahora guardan prisión para no seguir haciendo daño a la población. pic.twitter.com/zFUhwGB4CS
— Ebal Díaz (@EbalDiazHN) April 3, 2019
Los gobiernos de Honduras y Nicaragua hasta el momento no se han pronunciado.
El caso de Honduras
En el caso de Honduras, las elecciones presidenciales de noviembre de 2018 causaron tensión política y social luego de la polémica reelección de Juan Orlando Hernández. La constitución hondureña prohíbe la reelección presidencial. Pero dos fallos emitidos por la sala de lo constitucional de la Corte Suprema de Justicia en 2015 declararon la inaplicabilidad del artículo 239 constitucional que prohíbe la reelección.
Las disputadas votaciones del 26 de noviembre también padecieron de irregularidades, después de que el conteo de votos fuera detenido abruptamente cuando el candidato opositor lo lideraba. Tanto la Organización de Estados Americanos como la Unión Europea hallaron falencias en el proceso.
En su discurso de investidura, Hernández dijo estar “listo para escuchar cualquier propuesta sin barreras porque de eso se trata el diálogo, que nos guiará a la reconciliación y a la recuperación del pueblo hondureño”.
El hermano del presidente Hernández
Juan Antonio “Tony” Hernández, hermano del presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, fue acusado y arrestado por una corte federal de Estados Unidos de narcotráfico y delitos relacionados con armas. Hernández ha negado los señalamientos y permanece detenido esperando el inicio de su juicio programado para septiembre de este año. Tras la detención de Tony Hernández en noviembre de 2018, el presidente Juan Orlando Hernández aseguró que “nadie está por encima de la ley”.
El motivo de estos comentarios críticos de Nayib Bukele en Twitter no se conocen. CNN está intentado obtener una reacción de los gobiernos de Honduras y Nicaragua que hasta el momento no se han pronunciado.
El caso de Nicaragua
Nicaragua atraviesa una profunda crisis política desde abril de 2018 cuando se desataron manifestaciones masivas por una reforma a la ley de pensiones que luego evolucionaron a protestas en contra del gobierno de Ortega. Esta semana la oposición nicaragüense se retiró temporalmente de las negociaciones con el gobierno de Ortega por lo que llama una violenta represión de las fuerzas policiales a una protesta exigiendo la liberación de los detenidos desde que comenzaron las manifestaciones.
Según el grupo opositor, el número de detenidos supera los 700 mientras que el gobierno de Ortega asegura que esa cifra es falsa. Ni gobierno, ni las organizaciones políticas se han podido poner de acuerdo en la cifra de muertos, sin embargo coinciden en que son cientos de vidas perdidas.
En 2007, Ortega retornó al poder con el Frente Sandinista para la Liberación Nacional (FSLN) mediante el sufragio universal y fue reelegido en 2011, a pesar de los cuestionamientos formulados por la oposición por haberse postulado al amparo de un fallo judicial de 2009, que declaró inaplicable solo para él la regla constitucional que prohíbe la reelección sucesiva. En 2016 volvió a ser reelegido por cuarta ocasión con el 72,5% de los votos, año en el que su esposa, Rosario Murillo, fue elegida como vicepresidenta.
Ortega se ha negado a la petición de la oposición de anticipar las elecciones programadas para 2021.
Con información de CNN