Por Eduardo Vázquez Bécker.- Los abogados del empresario Enrique Rais, José Campos Ventura, Hernán Cortez y Silvia Bonilla reiteraron esta mañana en conferencia de prensa, una denuncia contra funcionarios de la Fiscalía General de la República a quienes acusan de haber violado la cadena de custodia de supuestas pruebas que el Ministerio Público sustenta contra su defendido.
Aunque un tanto discretamente, en voz baja o en secreto (sotto voce), la denuncia de cómo y quiénes violaron la cadena de custodia de las escuchas telefónicas utilizadas para procesar a Rais y otras ocho personas, ha desatado polémica en los sectores forenses nacionales e internacionales que consideran el hecho como un elemento de prueba viciada que eventualmente puede provocar nulidad.
Los abogados hicieron referencia a la existencia de las violaciones denunciadas apoyados por una serie de documentos certificados del juicio que la PRG sigue contra su cliente.
“A mi juicio (la prueba) está viciada”, sostuvo el abogado Campos Ventura, quien asegura que la sola duda sobre la cadena de custodia de las llamadas telefónicas debió declararse como razón de nulidad del caso que afecta a su cliente Enrique Rais.
“En autos consta que la cadena de custodia ha sido violada y por lo tanto como prueba tiene vicios. Y yo creo que eventualmente va a provocar una nulidad”, afirmó Ventura apoyado por sus colegas Cortez y Bonilla.
Como evidencias de lo denunciado, los abogados hicieron referencia, en primer término, que las escuchas telefónicas que utilizó la Fiscalía General de la República habían caducado de acuerdo a la ley que las autoriza y no podían ser utilizadas en contra de su cliente.
Asimismo, los abogados destacaron que el director del Centro de Intervención de las Telecomunicaciones puso a disposición del juez Séptimo de Instrucción de San Salvador, el material obtenido de la intervención ” debidamente embalado, rotulado u enumerado como evidencia y que se encontraba en el depósito de evidencias bajo custodia del Centro de Intervención de las Telecomunicaciones” lo cual no era cierto pues según los abogados de Rais, la evidencia aún no había sido extraída de los servidores del centro y tampoco se encontraban ya embaladas.
Como conclusión los abogados hicieron énfasis en que el juzgado séptimo de Instrucción se da por recibido de pruebas que aún no habían sido obtenidas y por lo tanto no existían.
Los vicios denunciados por los abogados van desde no leerle sus derechos constitucionales a los detenidos y de haberlos mantenido detenidos por más de setenta y dos horas sin permitirles comunicación con sus abogados que ya habían sido debidamente acreditados, tal como consta en autos.
Los abogados de Rais aseguraron que, según consta a folio 3549 de la pieza 18 del juicio, consta en el formulario especial de control de la cadena de custodia de la evidencia las ilegalidades cometidas en la misma ” ya que se produjeron rupturas en dicha cadena de custodia, que demuestran, con total certeza, que la prueba obtenida y utilizada contra el empresario Enrique Rais y otros, fue contaminada, manipulada o alterada, lo que lleva indefectiblemente a la nulidad que la defensa ha solicitado al juez séptimo de Instrucción.