Nicolás Maduro llora la derrota de la izquierda en Venezuela

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Inmediatamente después de que el Consejo Nacional Electoral diera los resultados oficiales de los comicios que definirán la composición de la Asamblea Legislativa, el presidente Nicolás Maduro habló desde el Palacio de Miraflores.

“Viendo estos resultados, nosotros hemos venido con nuestra moral, con nuestra ética, a reconocer estos resultados adversos, a aceptarlos y a decirle a Venezuela que triunfó la Constitución y la democracia”, dijo Maduro en un discurso televisado.

Ante una derrota cuya magnitud la hace imposible de ignorar, el mandatario venezolano instó a sus partidarios a admitir este revés “en paz” y revisar lo que se debe “rectificar”.

Después de cuestionar a la oposición por no reconocer una serie de victorias del oficialismo que Maduro fue enumerando casi una por una, el sucesor de Hugo Chávez sentenció que ganó “la guerra económica”.

“En Venezuela no ha triunfado la oposición, en Venezuela ha triunfado circunstancialmente una contrarrevolución que ha impuesto su escenario, su guerra”, alegó Maduro, quien agregó: “Administren muy bien ese triunfo que han obtenido y ojalá puedan ponerse en sintonía con la necesidad de que cese la guerra económica”.

Minutos antes, Tibisay Lucena Ramírez, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), había informado los primeros resultados oficiales que le daban una contundente victoria a la oposición nucleada en la Mesa de Unidad Democrática (MUD).

Según la funcionaria, la MUD obtuvo al menos 99 escaños contra 46 del oficialismo, de un total de 167 diputados, aunque precisó aún falta por dirimir 22 escaños.

En conferencia de prensa Tibisay Lucena afirmó que esos resultados, que dan la mayoría simple a la oposición, son “irreversibles”, tras tener contabilizado el 96% de las mesas electorales.

Los 22 escaños que aún no han sido asignados son claves para saber si la oposición conseguirá una mayoría calificada de 2/3, necesaria para sancionar leyes orgánicas, convocar una Asamblea Constituyente para reformar la Constitución Nacional, y remover a los miembros del TSJ.