Usaban hermosas azafatas colombianas para trasladar anualmente hasta 250 millones de dólares en operaciones de lavado de dinero desde Europa, América Latina y Estados Unidos.
Y los hilos de esa enorme red internacional eran manejados en parte por el cártel dirigido por el narcotraficante mexicano Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán.
Esos son algunos de los detalles que comienzan a trascender tras un operativo internacional denominado ‘Pájaro Azul’ que desarticuló la operación y condujo al arresto de una veintena de azafatas de la aerolínea Avianca, entre otras personas involucradas.
La red extendía sus tentáculos desde Sudamérica hasta Europa, con puntos en España, México, Colombia, Perú, y Bolivia y Estados Unidos, pasando por El Salvador.
“En México encontramos que algunas de las personas involucradas en esta actividad tenían vínculos con integrantes del Cártel del Pacífico. Es dinero propio de actividades ilícitas porque lo que se estaba haciendo es ingresarlo ilegalmente a Colombia”, dijo el vicefiscal colombiano Jorge Perdomo.
En el operativo participó la Fiscalía General de Colombia, la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, la Guardia Civil española, la Policía de México, la Dirección de Investigación Criminal de Colombia (DIJIN) y la aerolínea Avianca.
El coronel Luis Poveda, director de la Dijin, dijo que hay información sobre los nexos de esta red con el cartel de Sinaloa, del que es líder ‘El Chapo’, actualmente encarcelado en una prisión de máxima seguridad en México.
“Posiblemente esa plata se que se traía de Norteamérica y España es producto del narcotráfico”, afirmó.
El contacto con los narcos colombianos y mexicanos
Homero Prieto Rivera, alias ‘el Tío’, de 53 años de edad, era el contacto con los narcotraficantes colombianos y mexicanos de al menos cuatro carteles, según una investigación del periódico colombiano El Tiempo. El hombre, también con ciudadanía colombiana, vive en México y uno de sus cuñados es congresista de Sinaloa.