Las firmas automotrices tienen claro que si en su portafolio de productos no incluyen una camioneta SUV, probablemente estarán condenadas a tener un número de ventas limitado. Vehículos que hace 15 años eran impensables por marcas como Jaguar o Porsche, hoy en día resultan indispensables, tal y como lo dicta el mercado.
Maserati entendió la lección y se aventuró a construir la Levante, primer SUV con tintes deportivos de la firma italiana con un futuro prometedor.
En la parte frontal, su mirada agresiva la forman los faros hasta las salpicaderas y la parrilla, engalanada con el logotipo de la marca en el centro.
Los laterales presumen un diseño afinado que se complementa con la caída del techo, el cofre alargado y una inclinación del parabrisas fuerte que acentúan deportividad.
La ficha técnica aún permanece oculta ya que oficialmente, la Levante, será presentada ante los ojos del mundo en el Salón de Ginebra el próximo primero de marzo, sin embargo, la firma del tridente ha confirmado que llevará tracción integral y suspensión neumática adaptativa, que mejorarán la seguridad, eficiencia y deportividad en la conducción.
Atendiendo a la lógica, probablemente bajo el cofre se esconda el ya conocido motor V6 3.0 litros de la marca, configurado para entregar 350 y 430 caballos de fuerza, así como una versión turbodiesel V6 3.0 litros de 275 caballos de fuerza proveniente del Ghibli, el primer Maserati con mecánica diesel.
