Nicolás Maduro ha perdido las elecciones legislativas venezolanas. La plataforma opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), ganadora de las mismas (al menos 99 de los 167 escaños), afirma que su victoria representa el “comienzo del cambio” en el país.
Tras 17 años de hegemonía chavista en el Parlamento, El partido de Nicolás Maduro, el sucesor de Hugo Chavez, es minoría en la Asamblea Nacional.
Estos resultados, además de un cambio político para Venezuela, podrían hacer tambalear el lujoso estilo de vida que envuelve al actual presidente de Venezuela y familia y que tantas críticas está causando por parte de la oposición y la sociedad civil.
El socialista, defensor del pueblo llano y confesor de Hugo Chavez vía pajarito, es decir Nicolás Maduro, ha acostumbrado a su familia y a él mismo a una vida propia de un multimillonario.
Comenzando por el hijo del presidente, Nicolás Maduro hijo protagonizó la primavera pasada un polémico vídeo en el que se le veía bailando en un lujo hotel de cinco estrellas de Caracas mientras le caían del cielo una auténtica lluvia de billetes.
Además del hijo, la mujer del presidente de la República Bolivariana de Venezuela en una de sus últimas funciones como primera dama apareció con un lujoso bolso de mano firmado por Chanel. Cilia Flores lució, durante el desfile del Día de la Victoria en Pekín, una lujosa cartera modelo Black Caviar Double Flap de Chanel valorada en unos 5,000 dólares.
Después de la mujer, el marido. Nicolás Maduro mantiene una vida como presidente de Venezuela donde sus gastos directos desde Miraflores suman 10,000 millones de dólares. De lo mismos, los presupuestos más elevados se dedican en viajes. Además, Maduro tiene un presupuesto de 12,4 millones de bolívares para invitar a sus amigos a comer y gastos de representación.
Por último, cabe mencionar a las hijas de Hugo Chávez. Por sorprendente que pueda parecer, las descendientes del fallecido mantienen una vida a la altura de las hijas de un presidente. De hecho, María Gabriela y Rosa Virginia Chávez continúan viviendo en La Casona, la residencia oficial que sirve como lugar domicilio de los Presidentes de Venezuela desde 1964 pero que Maduro cedió a las hijas del expresidente. También, Gabriela y Rosa continúan viajando en aviones presidenciales y demostrando el dinero que disfrutan subiendo a Instagram polémicas fotos como la siguiente.