La embajadora estadounidense en El Salvador, Mari Carmen Aponte advirtió el jueves en rueda de prensa que las leyes de EE.UU. no han cambiado con respecto a los procesos de deportacion para centroamericanos que llegaron de manera ilegal a los Estados Unidos.
“Las repatriaciones que están siendo efectuadas el día de hoy y que se realizan todos los días de la semana están ordenadas en concordancia con las leyes de los EE.UU”, indicó Aponte.
“Es importante enfatizar en que hay consecuencias claras y graves para las familias y los individuos que no cumplan con la ley de migración, la cual no ha cambiado (…) quienes no tienen ninguna base legal, ni documentos van a ser repatriados”, dijo la embajadora.
Aponte aclaró que las familias e individuos que han sido repatriados pueden solicitar beneficios migratorios a través de las cortes de migración y cuando se repatrian es porque ya ha habido un fallo donde la Corte ha decidido que no califican para ninguno de los beneficios migratorios disponibles.
“Entiendo las situaciones difíciles que motivan a las personas a emprender un viaje, que como se ha dicho anteriormente esta lleno de peligros e incertidumbre, pero esto no quiere decir que los que entran sin documentos puedan quedarse”, aseveró.
La diplomática estadounidense aseguró que las capturas y deportaciones que se han hecho desde el pasado 2 de enero están siendo efectuadas en concordancia con las leyes de los Estados Unidos y sin violentar los derechos humanos de las personas.
Sin embargo, “Hay consecuencias claras para quienes no cumplen con las leyes de migración, las leyes de EE.UU. no han cambiado” afirmó.
“Quienes no cuentan con sus documentos serán repatriados”, lamentó Aponte.
Por su parte, la vocera para Latinoamérica del ICE, Bárbara González, hizo un llamado vehemente al pueblo salvadoreño en no creer en los coyotes. La ley no ha cambiado, dijo. “Los coyotes solo quieren quitar su dinero” dijo Barbara agregando que el crimen que se da con mayor frecuencia son las violaciones a las mujeres a manos de los delincuentes.
Si una persona es detenida y muestra los documentos en regla, no son detenidos, en EE.UU. somos un país de leyes y respetamos los DD.HH. de los migrantes, aclaró.
En los Estados Unidos de Norteamérica se trata a las personas en los centros de detención con humanidad y dignidad, finalizó.