Eran las cuatro y media de la tarde cuando un grupo de mujeres se plantó frente a los Tribunales de Justicia y comenzó a sacarse la ropa ante la atónita mirada de los peatones que circulaban por el lugar. Se manifestaron con la fuerza potente de sus cuerpos desnudos a los que acompañaron con carteles: “Femicidio es genocidio”.
La caravana de protesta fue organizada por la agrupación Fuerza Artística de Choque Comunicativo (F.A.C.C.), que ya había realizado otras performances del mismo tipo. Las más de cien mujeres, todas sin ropa, se movieron, gritaron, se tiraron al piso, acompañadas por música de una orquesta de violinistas y bajistas.
La performance del grupo F.A.C.C. se completó con consignas, frases, palabras de mujer que se escuchaban a través de un megáfono: Formas de matar a una mujer: cortarle el cuello, muerte instantánea, abandonada sin agua, encerrada con agua pero sin comida, estrangulada, quemada, congelada, desangrada, golpeada con un objeto, acuchillada en el corazón, y cuánto tardaría cada una de esas muertes. Hablaron de justicia, de cultura patriarcal, de cuerpos proscriptos. Y de la libertad de decidir de los propios cuerpos.
Primero habían hecho lo mismo en la Plaza de Mayo, justo frente a la Casa Rosada. Y la protesta culminó frente al Congreso.
Todo se dio en el marco de la tercera movilización contra la violencia de género, que contará con diferentes actos y concluirá este sábado con una nueva marcha organizada por el colectivo #NiUnaMenos. (Clarín)