El Gobierno de Venezuela dio oficialmente un plazo de 72 horas al embajador español, Jesús Silva Fernández, para que abandone el país tras ser declarado “persona non grata”.
La decisión del Gobierno de Nicolás Maduro fue anunciada este jueves por el ministro de Asuntos Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, a través de un comunicado difundido por Twitter.
La expulsión del diplomático español se produjo dos días después de que el Ejecutivo venezolano llamara a consultas a su embajador en Madrid, Mario Isea, a quien acuso de “agresión injerencista y colonialista” por parte del Gobierno de España. Además, Venezuela entregó una “contundente” nota de protesta a diplomáticos de la Unión Europea acreditados en el país por las sanciones comunitarias contra siete altos funcionarios de la nación caribeña.
En España las reacciones han sido variadas y distintas. El líder del partido Ciudadanos, Albert Rivera, ha lamentó que el ejecutivo que preside Rajoy haya tardado tanto en actuar y tampoco estuvo de acuerdo con la respuesta.
El gobierno de Venezuela achaca a España el impulso, junto a otros países, de las sanciones que la Unión Europea impuso este lunes a siete altos funcionarios del Gobierno venezolano, entre ellos al ministro de Interior, Nëstor Reverol; al número dos del chavismo, Diosdado Cabello, y a la presidenta del poder electoral, Tibisay Lucena. La UE les acusa de “menoscabar la democracia y el Estado de derecho”, “graves violaciones de los derechos humanos” y reducir las competencias del Parlamento de mayoría opositora desmantelado por la Constituyente.
El presidente Maduro culpó abiertamente de la creciente presión internacional al Gobierno español y lo calificó de ser “La elite, la oligarquía racista, colonialista, que gobierna España”. “El Gobierno más corrupto que jamás se haya conocido en la historia de España lo preside Mariano Rajoy”.
Desde Davos, donde asistía al Foro Económico Mundial, el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, señaló que España responderá “con proporcionalidad y reciprocidad” a la decisión de Venezuela y rechazó las acusaciones de “injerencia” proferidas por el Gobierno venezolano. Dastis recalcó además que lo único que ha hecho España desde el principio es “ayudar al proceso” de diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición.