Los cuerpos de una familia asesinada en Alameda, California, Estados Unidos, fueron repatriados a El Salvador. El 9 de agosto llegó el cuerpo de Miguel Cárcamo, de 70 años, quien era el suegro y abuelo de las víctimas.
Mientras que el 18 de agosto llegaron los cuerpos de Brenda Natali Morales, de 36 años, esposa del supuesto homicida; sus hijos Wesley y William Killian Morales, de 1 y 6 años; y su madre, Marta Elena Morales, de 56 años.
Los cuerpos fueron velados y posteriormente enterrados en el cementerio de San Cayetano, Istepeque, en San Vicente Sur, el lunes 19 de agosto.
Los asistentes llevaron camisetas con las imágenes de la familia y lanzaron globos al cielo poco antes de sepultarlos.
El 10 de julio, Shane Killian, de 54 años, presuntamente asesinó a sus suegros, esposa y dos de sus hijos en Alameda, California. Killian enfrenta múltiples cargos graves, incluyendo uso de arma de fuego, lesiones corporales graves y varios cargos de asesinato.
El 23 de junio, Shane Killian compareció en la corte del condado de Alameda, donde su defensora pública solicitó posponer la audiencia por un mes. Killian fue detenido sin derecho a fianza.
La audiencia reveló la falta de emociones del sospechoso. Trece familiares de las víctimas estuvieron presentes y expresaron su dolor y frustración ante la falta de remordimiento del acusado. Los familiares solicitaron a la fiscalía considerar el caso con circunstancias especiales para una sentencia más severa.
Carlos Morales, hermano y tío de las víctimas, pidió la pena máxima para Killian, destacando la indefensión de los niños asesinados.
El motivo detrás de la masacre aún es desconocido, pero se reveló que Killian maltrataba a su esposa y suegra. Carmen Morales, una de las víctimas, había expresado su preocupación por el comportamiento errático de su yerno. Según relatos familiares, Killian mostraba conductas abusivas, especialmente bajo los efectos del alcohol.
Carlos Morales compartió detalles de los abusos sufridos por su hermana y sobrina. En una ocasión, Carmen Morales se comunicó con su hermano para quejarse del comportamiento agresivo de Killian.
Shane Killian deberá presentarse nuevamente en la corte el 30 de agosto, fecha en la que se espera que la audiencia proporcione más detalles sobre el caso y las posibles consecuencias legales para el sospechoso.
