Janet Reno la primera mujer que fue fiscal general en Estados Unidos, falleció este lunes a los 78 años. Según datos proporcionados a la prensa por la ahijada de Reno, esta murió debido a las complicaciones del mal de Parkinson que padecía desde 1995. Ejerció como Fiscal General bajo el mandato de Bill Clinton, entre 1993 y 2001.
Reno fue una de las personalidades más reconocidas de la Administración de Clinton. Durante sus casi ocho años al frente de la jefatura del Ministerio de Justicia en EE UU afrontó casos importantes de terrorismo, como el de Unabomber, por el que fueron condenados Timothy McVeigh y Terry Nichols por la matanza de Oklahoma en 1995, cuando colocaron un camión bomba. También fue muy relevante el caso de Omar Abel Rahman, acusado del atentado de 1993 en el World Trade Center de Nueva York.
Sus ocho años como fiscal general estuvieron marcados por dos episodios. El primero de ellos, en 1993, poco después de asumir el cargo, cuando autorizó el asalto a una secta religiosa en Waco (Texas). Entonces, Reno argumentó que los davidianos podían estar abusando de niños. La redada concluyó con más de 80 muertos tras un incendio.
Otra de sus intervenciones más polémicas fue la autorización, en el año 2000, de una operación armada que permitió el traslado del niño balsero Elian Gonzalez que vivía con unos parientes en Miami, de nuevo a Cuba, junto a su padre.