Un grupo de investigadores australianos ha desarrollado una técnica para identificar desechos plásticos desde el espacio con la ayuda de imágenes satelitales, según se detalla en un estudio publicado recientemente por la revista Marine Pollution Bulletin.
La herramienta satelital tiene la capacidad de captar desde más de 600 km de altura las diferentes formas en que la arena, el agua y los plásticos reflejan la luz.
Enfoque en las playas y la arena
Si bien existen otras tecnologías similares para rastrear grandes cantidades de plásticos flotando en los océanos, la nueva herramienta se diferencia por identificar plásticos en las playas, que suelen mezclarse con la arena.
De esta forma, se puede saber con mayor precisión donde se encuentran los desechos plásticos en las playas y organizar las respectivas labores de limpieza, proponen los investigadores.
Es «increíblemente emocionante»
Para probar su eficacia, el equipo de científicos colocó 14 objetos de diferentes tipos de plásticos y de unos dos metros cuadrados en diferentes playas al sur de Gippsland, en el estado sureño de Victoria.
«Esto es increíblemente emocionante, ya que hasta ahora no disponíamos de una herramienta para detectar plásticos en entornos costeros desde el espacio», dice la coautora Mariela Soto-Berelov, en un comunicado de la Universidad Real Instituto de Tecnología de Melbourne (Australia).
«La detección es un paso clave necesario para comprender dónde se acumulan los residuos plásticos y planificar las operaciones de limpieza, lo que se alinea con varios objetivos de desarrollo sostenible, como la protección de mares y océanos», agrega.
Nefastas consecuencias para el medioambiente
Más de 10 millones de toneladas de desechos plásticos terminan cada año en los océanos. Para el 2030, esta cifra podría alcanzar los 60 millones.
Estos residuos tienen nefastas consecuencias para la naturaleza y los ecosistemas. Y, de no eliminarse, los desechos plásticos terminarán convirtiéndose en fragmentos de microplásticos o nanoplásticos.
«Los plásticos pueden confundirse con comida. Los animales más grandes se enredan y los más pequeños, como los cangrejos ermitaños, quedan atrapados en el interior de objetos como recipientes de plástico», afirma en el reporte la autora principal, Jenna Guffogg.
«Las playas de islas remotas presentan algunas de las mayores densidades de plásticos registradas en el mundo, y también estamos viendo volúmenes cada vez mayores de plásticos y aparejos de pesca abandonados en las costas remotas del norte de Australia», agrega.
Ahora, los investigadores planean utilizar su nueva herramienta satelital en escenarios reales.
Con información de la Universidad Real Instituto de Tecnología de Melbourne, IFLScience, Space.com, y Marine Pollution Bulletin