Organizaciones ambientales de Belice alertaron sobre los peligros del arrecife de coral, el cual enfrenta crecientes amenazas que ponen en riesgo su biodiversidad y su valor ecológico.
Según el llamado de atención, el Sistema de Reservas de la Barrera del Arrecife de Belice reconocido como Patrimonio de la Humanidad por las Naciones Unidas desde 1996, sufre desgaste debido al impacto de huracanes y el aumento de la temperatura del mar.
La Fundación para la Conservación de Belice (FCB) agrupación líder en emitir llamados a la acción para evitar un desastre, reconoció que la acción humana sin control como la contaminación por desechos, el turismo no regulado, la pesca ilegal y el tráfico marítimo aceleraron la degradación del coral y ponen en peligro su preservación.
Con una extensión de 300 kilómetros —parte del Sistema Arrecifal Mesoamericano, el segundo más grande del mundo—, este ecosistema alberga una variada diversidad marina, incluyendo 70 especies de coral duro, 36 de coral blando y 500 especies de peces.
«Perder el arrecife sería una catástrofe ecológica y económica para Belice», afirmó la FCB, que sugirió mayor regulación de actividades turísticas y pesqueras, monitoreo científico para combatir el cambio climático y cooperación internacional para reducir la contaminación oceánica.