Desde la cubierta de un enorme portaaviones, el vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, advirtió el miércoles a Corea del Norte que no ponga a prueba la determinación del ejército estadounidense, prometiendo que se ofrecerá una respuesta “abrumadora y eficaz” al uso de cualquier arma convencional o nuclear.
“Quienes desafíen nuestra determinación o preparación deberían saber que venceremos cualquier ataque con una abrumadora y efectiva respuesta”
Mike Pence, vicepresidente de los Estados Unidos
A bordo del USS Ronald Reagan, Pence, vestido con una chaqueta verde militar, dijo que el gobierno del presidente Donald Trump continuará “trabajando con diligencia” con aliados como Japón, China y otras potencias globales para aplicar presión económica y diplomática sobre Pyongyang. “Como todos saben, la preparación es la clave”, declaró.
“Los Estados Unidos de América siempre buscará la paz, pero con el presidente Trump, el escudo está en guardia y la espada está lista”, dijo ante 2.500 soldados con uniformes azules y gorras de la Marina en una soleada y ventosa mañana a bordo del portaaviones, fondeado en la base naval de Yokosuka de la bahía de Tokio.
“Quienes desafíen nuestra determinación o preparación deberían saber que venceremos cualquier ataque y equipararemos el uso de cualquier arma convencional o nuclear con una abrumadora y efectiva respuesta estadounidense”, agregó.
Washington honrará su alianza con las naciones de la Cuenta del Pacífico y protegerá la libertad de navegación en el Mar de China Meridional, las rutas marítimas vitales para la navegación global que China reclama como suyas, señaló el dirigente.
Pence visita Japón dentro de una gira de 10 días que lo llevará también a Indonesia y Australia.
Desde dos continentes distintos, Pence y el secretario de Defensa de Estados Unidos, Jim Mattis, señalaron que el lanzamiento fallido de un misil norcoreano fue una provocación temeraria y aseguraron a sus aliados en Asia que Washington está listo para trabajar en favor de la desnuclearización pacífica de la Península de Corea.
Mattis denunció el lanzamiento de un proyectil de Pyongyang en el inicio de su visita a Oriente Medio, diciendo a los periodistas que viajaban con él a Arabia Saudí que “el líder de Corea del Norte, de forma temeraria, volvió a intentar provocar algo lanzando un misil”. El término “temerario” es utilizado por autoridades norcoreanas para describir los masivos entrenamientos militares conjuntos de Estados Unidos y Corea del Sur, que califica de ensayo para una invasión.
El responsable de Defensa no identificó el tipo de misil, pero agregó que no tenía rango continental, lo que supone que no podría alcanzar territorio estadounidense. No realizó comentarios sobre las causas que podrían haber provocado la temprana explosión.
Otro funcionario, que pidió no ser identificado para hablar sobre el tema, apuntó que el proyectil era una variante del misil Scud al que Washington llama KN-17.