Variación genética explicaría por qué algunas personas parecen más viejas que su edad

0
813

Tener una apariencia más vieja que la edad sería en parte debido a una variación genética, señala un estudio difundido este jueves, que establece por primera vez una vinculación entre la percepción del envejecimiento y un gen específico.

“Por primera vez se halló un gen que explica en parte por qué algunas personas parecen más viejas y otras más jóvenes que su edad”, afirma Manfred Kayser, de la facultad de medicina de la Universidad Erasmus de Rotterdam, en Holanda, el principal autor de estos trabajos.

Llamado “MC1R”, este gen, conocido por generar cabellos rojos y una tez clara presenta a veces una variación que hace que una persona parezca unos dos años más vieja que quienes tienen su misma edad y carecen de ese gen, subrayan los investigadores, cuyo estudio fue publicado en la revista científica Current Biology.

Investigaciones precedentes habían demostrado que en la percepción de la edad influye una combinación de factores genéticos y ambientales, destacan los científicos. La edad que aparenta una persona puede reflejar, además, su estado de salud y su esperanza de vida.

Los científicos analizaron el genoma de unos 2.700 holandeses para determinar las variaciones genéticas relacionadas con diferentes percepciones de la edad. El gen MC1R apareció como el que más incide en la percepción de la edad a partir del rostro de una persona, lo cual fue confirmado por otros dos estudios llevados a cabo en Europa.

En el vínculo entre variante genética y edad no tuvieron incidencia el sexo, el color de la piel o los daños debidos a la exposición al sol, precisan los científicos.

El MC1R está relacionado además con procesos biológicos como las inflamaciones y la reparación del ADN, lo que podría explicar su relación con el hecho de que una persona parezca más vieja que lo que en realidad es.

La variación de este gen es sólo un factor entre muchos otros que intervienen en la percepción de la edad de una persona, relativizaron los científicos, que proyectan continuar sus investigaciones para intentar identificar otros genes que podrían jugar un papel en este plano.