Un terremoto de magnitud 5,7 en la escala de Richter volvió a sacudir Nepal el sábado, cuando se cumplen tres semanas del violento sismo que provocó la muerte de unas 8.000 personas.
No se han reportado víctimas hasta el momento.
El Servicio Geológico de Estados Unidos situó el epicentro del nuevo temblor a 76 kilómetros al sureste de la capital, Katmandú.
El sismo se produjo a las 11:34 GMT y se ha sentido en algunas zonas colindantes del norte de la India.
El temblor se produjo sólo cuatro días después de una réplica de 7,3 que también dejó decenas de muertos y miles de heridos.
La situación de Nepal sigue siendo muy delicada. La Cruz Roja solicitó el sábado US$93 millones para paliar la situación del país.
Los equipos de socorro han estado trabajando durante semanas para proporcionar agua, alimentos, refugio y asistencia médica a la población, después de que los sismos destruyeran pueblos enteros y dejaran a miles sin refugio a apenas semanas de que lleguen las lluvias monzónicas.
“Estamos en modo de emergencia total. La tarea sigue siendo ampliar nuestra respuesta a la vez que atendemos las necesidades emergentes “, dijo Elhadj As Sy, secretario general de la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
“Este tipo de desastres dejan también muchas heridas invisibles. La gente está traumatizada, tiene miedo. Están muy conmocionados “, añadió.
El gobierno de Nepal se está enfrentando a numerosas críticas por su lenta respuesta ante los acontecimientos de las últimas semanas.
Pero el Ejecutivo sostiene que se siente abrumado por la magnitud de estos desastres. No en vano, el terremoto del 25 de abril fue el más mortífero para el país en más de 80 años.