El régimen de Daniel Ortega en Nicaragua decidió otorgar asilo político al ex presidente de la República, Mauricio Funes Cartagena, a su compañera de vida, Ada Mitchell Guzmán Sigüenza y a tres de sus varios hijos, todos de difetente madre. Al hijo que procreó con la ex primera dama, Vanda Pignato, no lo incluyó entre los asilados.
“Hemos conocido por Gaceta Oficial de Nicaragua que el expresidente Funes solicitó 1/09 asilo en Nicaragua y le fue concedido”, infomó el Secretario de Comunicaciones del presidente Salvador Sánchez Cerén, Eugenio Chicas.
Mauricio Funes Cartagena es investigado desde la administración fiscal anterior por varios delitos, entre ellos enriquecimiento ilícito y actos de corrupción en contra del Estado.
Funes se marchó del país al enterarse que la casa en que habitaba y varias propiedades y negocios de su amigo y aparente testaferro, Miguel Menéndez, estaban siendo registrados con orden judicial en busca de pruebas para los delitos que se le impuarían.
Funes, supuestamente advertido por amigos dentro de los cuerpos de seguridad, que él y sus diversas residencias seguían en la lista de lugares a allanar, decidió huir del país, con la excusa que publicó en su cuenta de Twitter, que se trataba de un viaje de trabajo y, al considerarse inocente, pronto volvería al país.
Sin embargo, diariolatino.net informó que ya existía un borrador de orden de arresto contra el mandatario, por lo que, al confirmarlo, presuntamente vía una fuente de la Fiscalía General de la República (FGR), decidió pedir oficialmente el asilo para él y sus familiares con la excusa de que su vida y la seguridad de su familia corren peligro en El Salvador. La Cancillería de Nicaragua decidió otrogar el asilo de manera inmediata.
Funes reside en Nicaragua en una casa de lujo en la carretera a Masaya, en una colonia llamada, de acuerdo a fuentes nicaraüenses “Altos del Bosque” y goza de seguridad armada proveída por el régimen de Ortega.
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