El coronel Inocente Orlando Montano tendrá que permanecer detenido en una cárcel de los Estados Unidos, después que un juez negó hoy la libertad condicional solicitada por sus defensores.
Montano se encuentra en espera de ser extraditado a España por el asesinato de cinco jesuitas españoles que le atribuyeron grupos de izquierda vinculados a defensores de Derechos Humanos.
El magistrado Terrence W. Boyle rechazó la petición de la defensa para liberar de manera provisional, por motivos de salud, a Montano, mientras se resuelve el proceso de su extradición a España, aprobada por una jueza en febrero del año pasado. Montano padece de quebrantos en su salud y aparentemente sufre de cáncer en la vejiga. Los médicos aseguran que el ex viceministro de Seguridad Públicano puede moverse sin ayuda debido a la artritis que sufre a raíz del encierro al que está sometido donde guara prisión.
Durante los últimos dos años, Montano ha estado encerrado en una prisión de Greenville (Carolina del Norte), en un celda para dos personas “del tamaño de un armario” y donde los reos pasan 21 horas del día recluidos con solo tres horas “de descanso”, según declaraciones de sus defensores. “No ha visto la luz del sol ni ha respirado aire fresco durante dos años, excepto cuando es transportado a la corte”, afirmaron.
El asesinato de los sacerdotes españoles es considerado como uno de los crímenes emblemáticos ocurridos durante el conflicto armado en El Salvador.
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