El ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, amenazó a la oposición en la Asamblea Legislativa que, en caso de no recibir los votos necesarios para seguir endeudando al país, continuará con recortes a los presupuestos de las carteras de Educación y Salud, para pagar la deuda del Gobierno con las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP’s).
En los meses de julio y octubre de este año, el Gobierno debe pagar más de $120 millones de Certificados de Inversión Previsional (CIP), dineros que no fueron incluidos en el Presupuesto General de la Nación por Hacienda, a sabiendas que se tenía que honrar la deuda en dichos meses.
El pasado mes de abril, el Gobierno recortó fondos del presupuesto de varios ministerios del Ejecutivo, en especial de las carteras de la gestión Educativa, de Salud y de Seguridad, además de mutilar el presupuesto de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), solo para cubrir el primero de tres pagos que el Ejecutivo se negó a incluir en el Presupuesto General de la nación 2017.
Los presupuestos de los proyectos de Gasto Social emblemáticos del Gobierno efemelenista de Salvador Sánchez Cerén, no fueron tocados, tampoco los fondos destinados para la propaganda de estado.
El secretario Técnico de la Presidencia, Roberto Lorenzana, ha aceptado que el endeudamiento de país supera ya el 60% del Producto Interno Bruto (PIB), convirtiendo a El Salvador en uno de los países en desarrollo con mayor endeudamiento.
Esta situación es agravada debido a que El Salvador se encuentra actualmente en situación de “Default”.
