El ex comandante guerrillero del FMLN, Raúl Mijango, anunció este fin de semana su decisión de convertir el hasta ahora llamado Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), vinculado a las pandillas en partido político
Según Mijango, en una denuncia enviada por correo electrónico a diariolatino.net, están siendo perseguidas por las autoridades, aunque ellos tienen intenciones de disputar las elecciones presidenciales de 2019.
“Aspiramos en el futuro según nuestro desarrollo y organización, convertirnos en partido legalmente constituido para participar electoralmente” reza el comunicado. Sin embargo en otra parte del documento rechaza que el voto sea considerado «el arma de los hombres libres» como lo afirmara Roberto d’Abuisson Arrieta, fundador de la conservadora Alianza republicana Nacionalista (ARENA).
Mijango ha mantenido un rol protagónico desde que, estando al servicio del ministerio de Seguridad, sirvió como mediador de la llamada tregua entre las pandillas. Desde entonces es considerado como uno de los principales voceros de las pandillas por lo que está siendo investigado en la Fiscalía General de la República (FGR).
En el comunicado, Mijango asegura que su partido está integrado por elementos «Populares, Revolucionarios, Vitalistas y Cristiano-Humanistas» y que sus referentes son el Arzobispo Oscar Arnulfo Romero y Enrique Alvarez Córdova, fundador del Frente Democrático Revolucionario (FDR) durante el conflicto armado.
La única cara visible del supuesto movimiento MRP, asegura asímismo que uno de sus objetivos es «luchar implacablemente contra la corrupción, organizar de forma diferente el aparato estatal para que aumenten las oportunidades de progreso y la convivencia familiar, cortar el clientelismo político».
Entre los propósitos del partido anunciado por Mijango estarían los de “recuperar la paz social cuanto antes, establecer un Estado social de derecho, convertir a El Salvador en un país de renta media, garantizar la seguridad alimentaria, erradicar el analfabetismo, implementar un segundo idioma, dar vivienda decente, consolidar un sistema de salud eficiente y promover una ciudadanía activa, entre otros”.