Empresarios que representan a la Asociación de Distribuidores y al Consejo Nacional de la Pequeña Empresa de El Salvador, salieron al paso de las más recientes declaraciones del Secretario Técnico de la Presidencia, Roberto Lorenzana, calificando de “irresponsables” sus más recientes declaraciones.
El Secretario Técnico afirmó que quienes pagan la extorsión vienen a ser los financistas de los pandilleros y por ende corresponsables de la ola de crímenes que tiene desesperado al país.
Sonia Jules y Ernesto Vilanova tienen absoluta razón en sus afirmaciones. ¿A quién se le ocurre acusar a las víctimas de la extorsión permanente a la que las pandillas tienen sometida a la sociedad salvadoreña de estar financiando a los grupos delincuenciales que el mismo gobierno no puede controlar?.
Lorenzana, ex Jefe de la campaña electoral de Mauricio Funes, acusa a quienes pagan la extorsión, sea de un millón de dólares en el caso de los grandes empresarios o de la ‘cora’ que debe pagar el vendedor de pan por ingresar a una colonia, nada menos que cómplices de los extorsionadores.
El Secretario Técnico de la Presidencia conoce perfectamente el origen de la tregua que hizo poderosas a las pandillas ya que gracias a estas él está en el poder, lo que convierte sus declaraciones más que irresponsables en un insulto a la ciudadanía.
Al sugerir que quienes pagan la extorsión puedan incurrir en delito, Lorenzana lo que hace es mostrar el poco valor que otorga a la vida de quienes a diario salen de sus casas en busca del sustento para su familia.
El abandono de una parte de las más importantes empresas del país, Industrias La Constancia, a seguir prestando un servicio vital debido a las extorsiones y peligro de muerte que enfrentaban sus empleados debió ser analizado por Lorenzana de otra manera y no como lo hizo.
Por si no se ha dado cuenta, Lorenzana envió con sus recientes declaraciones un mensaje más que claro a las pandillas: Sigan extorsionando que el gobierno los apoya y a la población otro más patético aún: Paguen o aténganse a las consecuencias.
El presidente Sánchez Cerén no debe ver hacia afuera en busca de desestabilizadores; debe ver hacia dentro. No tenemos nada en contra de Lorenzana, solo estamos viendo el desasosiego que sus declaraciones han traído a los empresarios, grandes o pequeños, y las contradicciones con los anuncios del presidente de combatir a las pandillas.
De qué servirá la reunión a la que ha convocado el Presidente de la República al fiscal general, a la presidenta de la Asamblea Legislativa y presidente de la Corte Suprema de Justicia, si ya de antemano Lorenzana anunció cuál es el modo de pensar del gobierno.
Los que financiaron la tregua entre las pandillas son los únicos responsables de que estas hayan crecido como lo han hecho, que tengan el control territorial que mantienen así como la impunidad contra la que los cuerpos de seguridad no quieren o no pueden hacer nada.
La población y los empresarios, grandes o pequeños, lo único que hacen es pagar, a costa de grandes sacrificios, el precio de la vida, la propia o la de sus seres queridos y el derecho a poder salir en busca de trabajo con la esperanza de poder regresar a sus casas.
