El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, acusó el jueves al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) de «crear una crisis a última hora» al «retractarse de entendimientos explícitos» y anunció un aplazamiento de la reunión que iba a celebrar su Gobierno para ratificar el acuerdo del alto el fuego para la Franja de Gaza acordado durante la jornada del miércoles.
«Hamás está renegando de los entendimientos y creando una crisis a última hora que impide un acuerdo», ha dicho su oficina. «Hamás se está retractando de entendimientos explícitos que fueron acordados con los mediadores e Israel, en un intento de extorsión en el último minuto», agregó, según ha recogido el diario israelí ‘The Jerusalem Post’.
La reunión del ejecutivo, que estaba prevista para las 11:00 hora local, queda así pospuesta de forma indefinida hasta que se resuelvan las discrepancias, aunque medios locales israelíes dicen que podría celebrarse por la tarde.
Sin embargo, un alto dirigente de Hamás negó que el grupo haya renunciado a lo acordado: «El grupo palestino Hamás está comprometido con el acuerdo de alto el fuego anunciado por los mediadores el miércoles».
Fractura en el gobierno de coalición israelí
El acuerdo de alto el fuego ha creado tensiones en el seno del gobierno hebreo, y dos ministros han amenazado con dimitir. De hecho, según la emisora pública Kan, el súbito atraso de la votación gubernamental podría deberse a «las deliberaciones en curso» del partido Sionismo Religioso, presidido por el ministro de Finanzas y colono ultraderechista Bezalel Smotrich, sobre si abandonar o no el Ejecutivo una vez se apruebe el alto el fuego.
Tanto Smotrich como el también colono y ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, se oponen a lo que consideran un acuerdo de «rendición» ante Hamás, que además impediría sus anhelos de que judíos colonos vuelvan a ocupar el enclave palestino posguerra.
Tregua en tres fases
Según lo acordado, el fuego entraría en vigor el domingo 19 de enero a las 12:15 horas, aunque sin precisar en qué huso horario. La primera fase (de un total de tres) se extendería por un periodo de 42 días en los que se liberarán 33 rehenes israelíes —vivos y muertos, con prioridad para mujeres, menores y ancianos— a cambio de la liberación de un número no especificado de prisioneros palestinos.
También se dará luz verde para la entrada de ayuda humanitaria y combustible a toda la Franja y la rehabilitación de hospitales.
Durante el desarrollo de estas acciones, las partes concretarán los detalles de la segunda y tercera fase del alto el fuego, que buscarán el fin definitivo de la guerra y la reconstrucción de Gaza.
Los mediadores —Catar, Egipto y Estados Unidos— establecerán en El Cairo un mecanismo de seguimiento del alto el fuego que supervisará la implementación del acuerdo y de todo lo que se ha pactado en el mismo, y que contará con un «mecanismo de denuncia» para reportar cualquier violación de sus términos.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha agradecido este miércoles tanto al presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, como al mandatario electo de ese país, Donald Trump, su ayuda en la consecución de un alto el fuego en la Franja de Gaza. La oficina del líder israelí apuntó en un comunicado que en su conversación les reconoció su aportación para avanzar en dicho pacto entre su país y Hamás.