La Policía Nacional Civil (PNC) investiga el surgimiento de un nuevo grupo de exterminio de pandilleros en la zona oriental y que supuestamente masacró esta semana, “enmascarados y con ropas oscuras”, a seis personas, informó el director de ese cuerpo de seguridad, Howard Cotto.
“En esa zona del país hemos tenido varios hechos presumiblemente vinculados a una estructura que se pudiera dedicar a matar a pandilleros; es una posibilidad real”, indicó Cotto, sin entrar en detalles.
El jefe policial explicó que la mayoría de las víctimas tenían vínculos con miembros de pandillas y que el crimen fue perpetrado por sujetos “enmascarados y con ropas oscuras” que sacaron a las personas de su vivienda.
“Este hecho sale de la tendencia que hemos tenido en estos meses, en que hechos de este tipo no habían ocurrido”, añadió Cotto, quien aseguró que la investigación es encabezada por “unidades especializadas” de la policía.
A mediados de marzo se registró otra masacre en el oriente salvadoreño, cuando cuatro jóvenes, supuestamente relacionados con la pandilla Mara Salvatrucha (MS13), fueron asesinados en circunstancias similares.
En julio de 2016, las autoridades desarticularon un grupo de exterminio, compuesto en parte por policías y financiado por empresarios locales y salvadoreños residentes en Estados Unidos, vinculado a unos 40 asesinatos desde 2014.
Este fue el primer grupo de “limpieza social” desarticulado en El Salvador desde 1996, cuando la policía detuvo a 16 supuestos miembros de un grupo de exterminio de pandilleros, incluidos dos oficiales de este cuerpo de seguridad, denominado “Sombra Negra”, que operaba también en el oriente del país.
La Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) investiga al menos 161 homicidios atribuidos a grupos de exterminio de maras, que comparten características comunes en su “modus operandi” como el uso de ropas similares a las de los miembros de los cuerpos de seguridad y de armas largas.