Incluyen a El Salvador entre 22 países que producen o permiten narcotráfico

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Agencias. El Salvador fue incluido en una lista de 22 países que según Estados Unidos son grandes productores o sus territorios de tránsito del narcotráfico, informó el la Casa Blanca.

Junto a Belice eran los únicos de toda América Central que aún no estaban en esa lista, que ahora pasa a tener 22 miembros, según el memorando firmado por el expresidente Barack Obama.

El memorando presidencial de Obama especifica que según los cálculos oficiales, unas 4 toneladas de cocaína transitaron por El Salvador rumbo a Estados Unidos en 2009. En el caso de Belice, la cantidad fue de unas 10 toneladas.

La presencia por primera vez de El Salvador en este listado evidencia la cruda realidad que vive la región centroamericana, donde por la falta de apoyo internacional y por el exiguo presupuesto destinado por los países para el combate al narcotráfico se deja a sus anchas un vasto territorio donde se puede producir y movilizar droga a cualquier latitud del mundo.

«La presencia de un país en la lista no refleja necesariamente los esfuerzos antinarcóticos de su gobierno o el nivel de cooperación con los Estados Unidos (…) La razón por la que los países figuran en la lista es la combinación de factores geográficos, comerciales y económicos que permiten el tránsito o la producción de drogas, incluso si un gobierno ha adoptado medidas de fiscalización de estupefacientes sólidas y diligentes», aclara el memorándum.

Entre los 22, solo dos fueron «reprobados» por la inacción de sus gobiernos: Bolivia y Venezuela. Ambos, por haber incumplido de manera «demostrable» sus obligacionesbajo los compromisos internacionales antidrogas.

«Por la presente designo a Bolivia y al régimen ilegítimo de Nicolás Maduro en Venezuela como países que no han cumplido de manera demostrable durante los últimos 12 meses con sus obligaciones en virtud de los acuerdos internacionales de lucha contra los estupefacientes (…) También he determinado (…) que los programas de los Estados Unidos que apoyan al gobierno interino legítimo en Venezuela son vitales para los intereses nacionales de los Estados Unidos».

Si bien no lo puso a la altura de Venezuela y Bolivia, Trump cuestionó la gestión del gobierno de Andrés Manuel López Obrador en México. El mandatario amenazó con reprobarlo si no corrige estos problemas en los próximos 12 meses.

«México necesita hacer más para detener el flujo de drogas mortales que entran a nuestro país. Necesitamos que el gobierno mexicano intensifique sus esfuerzos para aumentar la erradicación de la amapola, la prohibición de drogas ilícitas, los enjuiciamientos y la incautación de bienes, y para desarrollar una estrategia integral de control de drogas. En particular, la plena cooperación de México es esencial para reducir la producción de heroína y hacer frente a la producción ilícita de fentanilo y a todas las formas de tráfico de drogas, incluso a través de los puertos de entrada de los Estados Unidos (…) Si no se logran nuevos progresos durante el próximo año, consideraré la posibilidad de determinar si México ha incumplido de manera demostrable sus compromisos en materia de fiscalización internacional de drogas».

En contraposición, el documento destacó el trabajo de Colombia. Lejos de las críticas que había lanzado en 2017 contra el entonces Gobierno de Juan Manuel Santos, alabó a Iván Duque, por el rápido progreso en la reducción de los cultivos de coca.

«En Colombia, el presidente Iván Duque ha logrado avances tempranos en el retroceso de los niveles récord de cultivo de coca y producción de cocaína heredados de su predecesor y en los esfuerzos para reiniciar un programa de erradicación aérea dirigido por Colombia. Este progreso debe continuar y expandirse, y mi administración trabajará con nuestros socios colombianos para alcanzar nuestra meta conjunta de 5 años de reducir a la mitad el cultivo de coca y la producción de cocaína para finales de 2023″.

Por último, Trump hizo un llamado especial a la restauración del orden democrático en Venezuela. «Continuaremos coordinando estrechamente con Colombia y otros socios de ideas afines en nuestro hemisferio para restaurar la democracia en Venezuela. Con el fin de la dictadura de Maduro plagada de elementos criminales, Estados Unidos tendrá una oportunidad mucho mejor de trabajar con Venezuela para detener el flujo de drogas que sale de Sudamérica».