El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, propuso el miércoles una fuerza trinacional con El Salvador y Guatemala para combatir las pandillas armadas que operan en los tres países centroamericanos.
“Iniciamos una nueva página en esta lucha y es la conformación de un esfuerzo trinacional entre Honduras, Guatemala y El Salvador para enfrentar uno de los fenómenos delincuenciales que más daño, que más muerte y sangre le han venido generando a este pueblo que ha sufrido tanto, las maras y pandillas”, dijo Hernández.
En declaraciones a la prensa en la Casa Presidencial, indicó que para tratar sobre el tema ha iniciado conversaciones con su homólogo de Guatemala, Jimmy Morales, y que en las “próximas horas” lo hará con el de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, quien se encontraba de visita en Costa Rica.
“No queremos esperar más tiempo sin echar a andar lo que ya hemos concebido como una solución regional”, enfatizó el gobernante.
Señaló además que formalizará una petición a Estados Unidos para que también le ayude a los tres países en la iniciativa regional, la que en su opinión “perfectamente calza en el Plan Alianza para la Prosperidad” del Triángulo Norte de Centroamérica que integran El Salvador, Guatemala y Honduras.
“También creemos fundamental que en este esfuerzo participe Estados Unidos, porque buena parte del caldo de cultivo para el desarrollo de estas actividades delictivas tiene que ver con el narcotráfico, que se convierte después en narcomenudeo, después en extorsión, en asaltos”, añadió.
El presidente recordó que el fenómeno de las pandillas o “maras”, nació, aunque quizá no con la dimensión violenta que ahora tienen, en Estados Unidos, en la ciudad de Los Ángeles, California.
En el transcurso de los años, las pandillas se vinieron a Centroamérica para instalarse en El Salvador, Guatemala y Honduras, señaló Hernández.
Además, destacó los buenos resultados que han tenido la Fuerza de Tarea Maya-Chortí en la frontera de Honduras con Guatemala y la Operación Sandino con Nicaragua, para combatir la delincuencia en los límites entre los tres países.
“Estoy seguro que podemos seguir mejorando, pero no habíamos hecho un ejercicio similar de carácter tan permanente de algo que ha sido beneficioso para Honduras y para Nicaragua, de colaboración muy estrecha en materia de seguridad”, expresó.
Dijo que “la Operación Sandino con Nicaragua es algo permanente, es una relación muy estrecha y muy efectiva”.
“Eso también queremos estructurarlo en nuestras relaciones con El Salvador y Guatemala, todos para atacar un problema de manera frontal sin descanso, que tanto daño nos hace, como son estos grupos criminales de las maras y pandillas”, recalcó.