Tres masacres sacudieron el país, que se encuentra inmerso en una espiral de violencia que parece no tener fin y que se ha ido de las manos de las autoridades.
La peor de las matanzas involucró a seis personas, ejecutadas en una finca rural por pandilleros que operan en la zona. Las víctimas tenían entre 16 y 28 años.
En otro poblado, tres miembros de una misma familia fueron asesinados mientras que las autoridades intentan esclarecer el móvil del asesinato de tres empleados de un camión que transportaba arena en el departamento de La Paz.
Las autoridades reportaron otros crímenes aislados en diferentes puntos del país que podrían pasar de 25 (a las 8 pm) el número de víctimas de la jornada.
En el primer semestre de este año, según fuentes oficiales, se registraron 2,865 asesinatos en El Salvador (15.8 por día), por encima de los 1,840 del mismo período de 2014.
En los primeros 9 días de agosto, las autoridades registran un promedio de 24 homicidios por día, el doble que el año pasado en el mismo periodo.
La Policía registra 212 asesinatos en nueve días de agosto, es decir, 104 más que el año pasado en el mismo lapso.
El 2 de agosto fueron cometidos 34 asesinatos, mientras que el 5 las autoridades registraron 33 homicidios.
Según las autoridades, la violencia que se vive en el país es generada en su mayor parte por las pandillas, que tienen un estimado de 72,000 miembros, de los cuales cerca de 13,000 están encarcelados por homicidios, extorsiones y otros delitos.
