Policías y agentes de migración de México detuvieron este miércoles a unos 600 migrantes que integran la cuarta caravana que salió de Salvador del Mundo el pasado 18 y que habían ingresado ilegalmente por el río Suchiate, que divide México y Guatemala.
Los salvadoreños fueron interceptados por las autoridades del Instituto Nacional de Migración y la Policía Federal de México a las afueras del municipio de Metapa de Domínguez, el estado fronterizo de Chiapas.
Los ondeaban banderas de El Salvador y Honduras, cuando fueron arrestados entre jaloneos y gritos y subidos en autobuses que los trasladaron a la estación migratoria de Tapachula donde, según las autoridades, podrán solicitar refugio.
Agentes del Instituto Nacional de Migración y de la Policía Federal explicaron que los migrantes fueron detenidos luego que se negaran a pedir asilo en México.
Previo a la detención, las autoridades migratorias les explicaron que no pueden permanecer en el país como indocumentados y los invitaron a pedir asilo o visa migratoria en México, sin embargo, el grupo intentó seguir caminando y fue interceptado por las fuerzas federales a la altura del entronque del municipio de Metapa de Domínguez en el tramo carretero Ciudad Hidalgo-Tapachula.
Los migrantes fueron trasladados a la delegación migratoria Siglo XXI con sede en Tapachula, Chiapas. Los integrantes la quinta caravana migratoria sólo caminaron 18 kilómetros en territorio mexicano.