Finalmente y cuando estaba por expirar el plazo que la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, CSJ, había fijado a la Asamblea Legislativa, fue aprobada la ley de reconciliación para víctimas del conflicto armado en El Salvador.
La aprobación de la ley tuvo el respaldo de 44 diputados de los 43 que se requería para su aprobación.
Con el rimbombante nombre de Ley Especial de Justicia Transicional, Reparación y Reconciliación Nacional fue sometida al pleno legislativo en una sesión plenaria extraordinaria que tuvo como punto único el dictamen.
La nueva ley es la creación del Consejo Nacional de Reparación (CONREPARA) se encargará de ejecutar las medidas y programas que la ley plantea para la reconciliación en El Salvador, entre estas medidas figura la creación de un Registro Nacional de Víctimas, en el cual se consignarán a las personas en su carácter de víctimas del conflicto armado salvadoreño.
Otros aspectos que contiene la ley es la creación de un Centro de Documentación de la Memoria Histórica que entre otras cosas se encargará de la promoción de la ley. La ley obliga al ministerio de Educación a que incluya en la currícula el estudio de la memoria histórica; esta medida será aplicable a la Fuerza Armada de El Salvador y a la Academia Nacional de Seguridad Pública.
El presidente Bukele, ya había adelantado a través de un comunicado emitido a primeras horas de la tarde, que si esa ley no cumplía con las disposiciones dadas por la sentencia de la Sala de lo Constitucional, él iba a vetarla y a devolverla a la Asamblea Legislativa.
