Gabinete de Seguridad y Fiscalía General de la República, informaron este jueves, que los cadáveres encontrados en una fosa clandestina de Nuevo Cuscatlán, pertenecen a los hermanos Karen y Eduardo Guerrero Toledo, desaparecidos desde el pasado 18 de septiembre en Santa Tecla.
De acuerdo con las declaraciones del ministro de Gobernación, los cadáveres de los hermanos Guerrero permanecían en ese lugar desde hace tres meses luego que fueron reportados como desaparecidos por sus familiares.
“Este día, aproximadamente a las 3:00 pm y tras las investigaciones del gabinete de seguridad ampliado, fuerzas de tareas y de la Fiscalía, hemos encontrado dos cuerpos en una sola fosa, según el médico forense los cuerpos tenían 3 meses de permanecer ahí”, reveló en conferencia de prensa Gustavo Villatoro, ministro de Seguridad.
Según el ministro las características dentales también coinciden con los de los hermanos Guerrero Toledo, pero serán las pruebas de ADN que determinarán con certeza si son ellos.
Los restos fueron encontrado en una fosa clandestina en una zona boscosa de Nuevo Cuscatlán, situada a unos 10 kilómetros desde donde desaparecieron.
Según fuentes de este periódico, la familia de los hermanos ingresó en horas de la tarde a la zona del hallazgo junto a funcionario de Seguridad.
“Sabemos que esto no regresa a la vida a Karen y Eduardo, pero como Gabinete de Seguridad ampliado nos comprometemos con la población a llevar ante la justicia a todos los criminales responsables de este repudiable caso”, dijo el ministro Villatoro.
El ministro, además, dio a conocer que se han realizado cinco capturas más de sospechosos de participar en el asesinato y la desaparición de Karen y Eduardo. Sin embargo, el funcionario no dio detalles, ni los nombres de los capturados
