En la mañana del viernes un amigo y yo acudimos a States Dinner, a tomar el desayuno, al entrar encontramos una decoración de los años 60, un buen concepto que ningún otro lugar tiene. Las mesas cómodas y perfectamente combinadas con una rockola gratis para uso del público, la cocina visible desde las mesas, da una sensación de limpieza y pulcritud, a mí parecer decoración e idea están muy bien ejecutados; inmediatamente llegó el mesero con la carta para que pudiésemos elegir algo de una amplia oferta.
Pedimos nuestras bebidas y en un par de minutos estaban frente a nosotros dos oscuras y humeantes tazas de café caliente; justo lo que necesitábamos.
Del menú dedicado a la cocina americana ordenamos dos desayunos de huevos y pancakes; esto es lo que puedo decir del desayuno: Los pancakes, estaban esponjosos y suaves, la presentación muy buena. El huevo frito exquisito y abundante, ¿condimentos? al gusto. La comida llegó rápido y estaba caliente, en mi opinión un buen desayuno americano.
Con la intención de hacer esta reseña y motivados por la labor del restaurante decidimos regresar al mediodía y conocer a Cameron un chef americano que dirige la cocina del States Dinner e indagar más sobre su trabajo.
El restaurante está ubicado en el Paseo General Escalón, frente al Centro Comercial El Paseo y al llegar, supimos que volver había sido una sabia decisión; lo imaginamos así, pues el parqueo estaba prácticamente lleno.
Entramos al restaurante y amablemente nos recibieron dándonos una mesa en el lugar de nuestra preferencia.
Casualmente ese día estaban celebrando el “Día de la Hamburguesa” y lo estaban haciendo en grande, con un especial compuesto por una hamburguesa de 1 libra (perdón a mi corazón) y papas fritas.
La presentación no pudo ser más americana. Las papas fritas de rejilla me impresionaron, se sentían frescas y crujientes, con buen sabor. La hamburguesa estaba cocinada como debe ser: a la plancha y en su propia grasa, debidamente acompañada con la cantidad justa de lechuga, tomates frescos y cebollas crujientes. Definitivamente repetible.
Visiten States Dinner, confíen en el chef Cameron, un cocinero americano que a través de su menú rinde tributo a la gastronomía popular del país de la bandera de las barras y las estrellas. No quisiera dejar de mencionar que las porciones de sus platillos son realmente abundantes, en contraste con sus precios que son bastante económicos, dejando una relación precio-beneficio ventajosa para los comensales.
Pero…. les cuento lo mejor del restaurante, aún mejor que su abundante, económica y generosa comida, States Dinner es un restaurante escuela, atendido prácticamente en su totalidad por jóvenes huérfanos entre los 18 y 20 años, que al ser mayores de edad tuvieron que abandonar los orfanatos y que necesitan adquirir un oficio para su vida.
States Dinner dedica todas sus utilidades a financiar a la Fundación Sus Hijos. Esta fundación trabaja con niños y jóvenes huérfanos en los hogares públicos o privados, enseñándoles inglés y mostrándoles el amor de Dios y de la sociedad, además de tener dos casas hogar que funcionan como centros de transición para jóvenes que al cumplir la mayoría de edad deben abandonar los orfanatos, así la Fundación Sus Hijos, acompaña a los niños antes de cumplir 18 años y después les da vivienda, trabajo y les ofrece la oportunidad de aprender un oficio para la vida.
Es un programa único que necesita que la mayor cantidad de personas sepan sobre él. Y lo mejor es, que se puede ayudar visitándolos y comiendo unos pancakes deliciosos.
En resumen: una grata experiencia, que fue mejorada al conocer del trabajo de States Dinner y la Fundación Sus Hijos; no vamos a designar con tenedores la calificación de nuestra experiencia, porque solo tenemos siete, pero quisiéramos darle mil.
