Así lo informó hoy el vocero de la Casa Blanca, Josh Earnest, quien aclaró que el presidente estadounidense no tiene en agenda visitar la isla caribeña en el corto plazo. Su gobierno finalizará en enero de 2017.
Al ser consultado durante su rueda de prensa diario por la visita del mandatario francés, François Hollande, a Cuba, el vocero de la Casa Blanca, Josh Earnest, señaló que en el corto plazo no está previsto que el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, viaje a la isla, pero sugirió una posible visita antes de que concluya el mandato presidencial en enero de 2017. “No lo descartaría”, indicó.
En diciembre, un día después del histórico anuncio del acuerdo para restablecer las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba, rotas desde hace más de medio siglo, Earnest había dicho estar seguro de que Obama “no rechazaría” viajar a la isla, “si había una oporatunidad” para hacerlo.
De hecho, unos días después, en su última conferencia de prensa del año, Obama descartó que estuviera en sus planes visitar pronto la isla o recibir en la Casa Blanca a su homólogo cubano, Raúl Castro. “Soy un hombre bastante joven, así que imagino que en algún momento de mi vida tendré la oportunidad de visitar Cuba”, comentó entonces el presidente en la sala de prensa de la Casa Blanca.
Estados Unidos está buscando posibles fechas para una nueva ronda de conversaciones con Cuba para restablecer las relaciones diplomáticas, en la que sería la primera reunión en persona de los jefes negociadores desde marzo, indicó a periodistas la semana pasada un vocero del Departamento de Estado de los EEUU.
Las tres rondas de negociaciones sobre el restablecimiento de relaciones han estado encabezadas hasta ahora por la secretaria de Estado adjunta de los EEUU para Latinoamérica, Roberta Jacobson, y la directora general para los Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Josefina Vidal.
En paralelo a las negociaciones entre Jacobson y Vidal, ambos países están manteniendo una serie de contactos sobre asuntos técnicos, como aviación civil y el tránsito de personas, y el pasado 31 de marzo mantuvieron un primer encuentro sobre derechos humanos, uno de los temas más espinosos en el proceso de acercamiento.
Además, Obama anunció en abril su decisión de eliminar a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo, una medida reclamada desde hace años por el régimen cubano y que podría agilizar el proceso de normalización de las relaciones diplomáticas.
Obama y Raúl Castro mantuvieron, en abril pasado en Panamá, en el marco de la VII Cumbre de las Américas, un encuentro bilateral histórico, el primero entre los líderes de los dos países en más de cinco décadas.