Piloto llega a Australia en vez de Malasia por utilizar mal el GPS

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Todos sabemos que al usar navegadores GPS, corremos el riesgo de que, insertando mal la información del destino al que queremos llegar, se cometa un grave error y nos dirija a un lugar alejado de nuestro interés.

Sin embargo, la historia de este piloto puede ser catalogado como uno de los más extraordinarios errores ocurridos con la manipulación de los GPS, quien quería ir a Malasia y terminó en Australia.

El 10 marzo de 2015 (aunque ha sido hasta ahora cuando la agencia australiana de seguridad hizo público el caso), el piloto de un vuelo de AirAsia que partía desde el aeropuerto de Sidney (Australia) con destino a Kuala Lumpur (Malasia) aterrizó por error en Melbourne (es decir, ni siquiera salió del país) tras introducir las coordenadas incorrectas en el navegador de su avión.

De acuerdo con la Agencia Australiana de Seguridad de Transporte (ATSB), el fallo se debió a una cadena de errores.

Primero, el avión Airbus A330 debía despegar desde una pista destinada a la partida de otro tipo de vuelos. Ello desencadenó los sucesos, que, señala la agencia, desubicó desde el principio al piloto, que luego introdujo mal las coordenadas del lugar al que se dirigía.

Así, al copiarlas de manera manual, tal como señala el medio británico ‘The Guardian’, introdujo 5° 19.8’ E, en lugar de las correctas, 151° 9.8’ E, por lo que cometió un error de una distancia de 6 mil 100 kilómetros.

Además, señaló la agencia que esto se pudo haber solucionado si sus audífonos hubieran funcionado correctamente y desde la torre le hubieran advertido del error. “Esto dio lugar a un error posicional de más de 11 mil kilometros, lo que afectó negativamente a los sistemas de navegación del avión y a algunos sistemas de alerta”, confirman ATSB.

Además indicó que la tripulación tuvo “una serie de oportunidades para corregir el error”, pero no se percataron hasta que ya estaban en el aire y era demasiado tarde. El piloto no pudo volver al aeropuerto de Sídney debido al mal tiempo, por lo que se dirigió hacia Melbourne, donde finalmente aterrizó.

Tuvieron que esperar tres horas para volver a despegar. Esta vez, ya con más cautela, llegaron a Kuala Lumpur, el destino original del vuelo.