Una operación a gran escala en contra de las pandillas se saldó con 1,133 detenidos en todo el país, la mayoría por pertenencia o asociación con grupos criminales como MS-13, Sureños, Norteños y Bloods, según informó este lunes la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas de EEUU (ICE, en inglés).
La intervención policial, bautizada “Project Shadowfire” y liderada por la Unidad Nacional de Pandillas de la división de investigación del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), se llevó a cabo entre el 15 de febrero y el 21 de marzo, y se concentró principalmente en los estados del sur y el oeste.
En Los Ángeles se produjeron 185 arrestos, 36 en el sur de Texas. Hubo múltiples las ciudades de San Juan, Atlanta, San Francisco, Houston, El Paso y Los Ángeles.
De los 1,133 individuos arrestados, 915 son presuntos integrantes y colaboradores de pandillas, un millar fue acusado de ofensas criminales y 132 quedaron bajo custodia por violar las leyes migratorias. La mayoría son ciudadanos estadounideses, aunque 239 personas son extranjeros provenientes de 13 países distribuidos entre Centramérica, Asia, Europa y el Caribe.
En el transcurso de este operativo, que perseguía a grupos de crimen organizado con delitos transnacionales, se decomisaron 150 armas de fuego, más de 20 kilogramos de narcóticos y más de 70,000 dólares.
“Project Shadowfire” se enmarcó dentro de la operación “Community Shield” que comenzó en febrero de 2005 dirigida a frenar el crimen transnacional de las pandillas callejeras y carcelarias en Estados Unidos. Hasta la fecha, se han producido más de 40,000 detenciones de pandilleros y requisado más de 8,000 armas de fuego como parte de este dispositivo.
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