Pese a que hay al menos tres demandas para anular las reformas que permiten la reelección presidencial indefinida ante la Sala de lo Constitucional, el Tribunal Supremo Electoral, TSE, desarrolla la planificación para las próximas elecciones.
La entidad, en manos del oficialismo, trabaja para las actualizaciones del Plan Estratégico Institucional (PEI), el Calendario Electoral y el Plan General de Elecciones 2027 (PLAGEL), para los próximos comicios generales, pasando por alto la posibilidad de que el Supremo salvadoreño deseche los cambios en el sistema político del país.
El TSE realiza cambios dando por firmes las recientes reformas aprobadas y ratificadas a la Constitución de la República, con el objetivo de garantizar la organización conjunta de las elecciones presidenciales, legislativas y municipales.
«Nos encontramos en una etapa decisiva de preparación. Con estas actualizaciones reafirmamos nuestro compromiso de organizar elecciones ordenadas, confiables y alineadas con las reformas aprobadas, siempre en beneficio de la democracia salvadoreña», declaró a periodistas la presidente del organismo Roxana Soriano.
Las elecciones en el país debían ocurrir en 2029 y ahora se unifican los comicios presidenciales, legislativos y municipales en 2027, a fin de mantener la actual administración en el poder, aprovechando la preferencia coyuntural de la población a favor del presidente Nayib Bukele.
