¡Qué gran alegría ver a tantos futbolistas hoy!\
Es muy emocionante verlos aquí esta mañana, listos para formar parte de la Liga Atlética Policial.
El deporte nos enseña muchas cosas: disciplina, valor, pasión. Pero creo que la mejor enseñanza es que practicar un deporte nos ayuda a descubrir nuestras fortalezas.
Cada uno de ustedes tiene talentos y habilidades diferentes, y eso está bien. Porque un equipo sólido tiene delanteros, y defensa y porteros. Y para ganar un partido, se necesita la fuerza de todos los jugadores que están en diferentes posiciones.
Esta es una lección que debemos recordar para toda la vida.
Nosotros aquí también somos un equipo, formado por la Policía Nacional Civil, Patria Unida, la Alcaldía de Soyapango y mi país, el gobierno de Estados Unidos. Y este programa ha sido posible gracias a la entrega de todos los integrantes de este equipo.
Quiero reconocer a cada uno de los policías que a diario entregan su tiempo para formar parte de la Liga Atlética Policial a todos los padres de familia que nos acompañan hoy.
Jóvenes, créanme cuando les digo que hay mucha gente que cree en ustedes. Somos muchas las personas que creemos en este gran equipo que es la juventud salvadoreña.
Pueden estar seguros que siempre habrá alguien a los lados animándolos. Puede ser un maestro, un miembro de la familia, un entrenador o un mismo compañero de equipo. Y todos queremos lo mismo: un futuro sin violencia, donde jóvenes talentosos como ustedes encuentren oportunidades en comunidades seguras.
Pero el éxito de este programa depende de ustedes y su compromiso de enfocar su energía a trabajar juntos para una misma meta. Atrévanse a ser parte de nuestro equipo, construyendo un mejor futuro para El Salvador.
Para los jóvenes aquí, cada uno de ustedes es alguien importante. Cada uno de ustedes vale la pena. Y de parte de nosotros les digo que creemos en ustedes. Tenemos la confianza que cada uno de ustedes puede cambiar este país.
Muchísimas gracias.
