El Ministerio de Hacienda se niega pagar la deuda política a los partidos políticos de oposición, lo que ahoga su participación en la campaña electoral, creando un caso de «competencia desleal» al si haber entregado los fondos de la deuda electoral y, según una fuente que pidió el anonimato, hasta un adelanto de la próxima al oficialismo y sus aliados.
Según la ley, el Estado debe pagar una cantidad de dinero por cada voto obtenido en la pasada contienda electoral y otorgar un anticipo de la deuda política de la próxima justa, un mecanismo de financiamiento público que se debería entregar a todos los partidos políticos en contienda.
El partido oficialista Nuevas Ideas fue el único en lanzar públicamente su campaña para candidatos a diputados, entre los 12 contendientes. Opositores reclaman el impago de la deuda política y denuncian el uso de recursos públicos para propaganda y proselitismo.
De las 13 agrupaciones habilitadas para hacer campaña, solamente el oficialista Nuevas Ideas realizó un evento de lanzamiento de campaña el domingo en las instalaciones de la excasa presidencial en San Jacinto, San Salvador, los demás partidos no cuentan con fondos para su logística electoral.
Lo poco que se conoce de los candidatos a diputados de oposición es lo que pueden comprar en espacios en redes sociales, lo que es financiado de su propia bolsa.
NI amenaza con «desaparecer» a la oposición
El presidente de Nuevas Ideas, Xavi Zablah Bukele, advirtió en su arenga política con que en las elecciones del 2024 la campaña se centrará en «desaparecerlos (a los partidos políticos de oposición) de una vez por todas».
“Necesitamos que salgan a votar masivamente para desaparecerlos de una vez por todas», aseguró, algo que según el refranero popular será “una pelea de tigre suelto y el burro amarrado”.
«Aumenta la inequidad en la contienda cuando hay un participante que abusa de los recursos públicos para su campaña», comentó Anabel Belloso, de comisión Política Frente Farabundo Martí, una de las agrupaciones que se debate por la falta de fondos para hacer campaña.
La deuda política se entrega según la cantidad de votos recibida en la elección anterior, según las normas establecidas por ley.
Según el artículo 210 de la Constitución de la República, «el Estado reconoce la deuda política como un mecanismo de financiamiento para los partidos políticos contendientes» y el objetivo de esa erogación es «promover su libertad e independencia».
Según el candidato a diputado Eduardo Vazquez Becker hijo, por la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), «No se trata solamente de estrategia política del oficialismo, sino de decencia, el que actúa con trampas, es un tramposo en todo». De acuerdo al médico de profesión, las instituciones internacionales deben relatar lo que el Ministerio de Hacienda está haciendo en El Salvador, «seguro que las órdenes de no pagar los fondos que la ley ordena salieron de la Casa Presidencial, antes que el presidente Nayib Bukele abandonara de manera inconstitucional el cargo que ostentaba».
Este año el Gobierno debía pagar más de 24.3 millones de dólares en concepto de anticipo de la deuda política, pero el Ministerio de Hacienda solo presupuestó cerca de medio millón de dólares y a pesar de ello al partido Nuevas Ideas si le hizo efectivo el pago y el adelanto.
El presidente del partido Nuestro Tiempo, Andy Failer, aseguró que el impago es «una maniobra política para ahogar las campañas electorales del resto de partidos», mientras Nuevas Ideas hace uso de los fondos públicos para promocionarse.
