Fuentes informantes que dijeron estar vinculadas a la Fiscalía General de la República (FGR) denunciaron el martes una “reunión” del fiscal “G” Arriaza, con un grupo de fiscales así como con personas particulares relacionadas con los casos Rais-Martínez y Corruptela, con el fin de buscar cualquier pretexto que permita a la FGR pedir a la Juez Cuarto de Instrucción la suspensión de medidas con las que cuentan imputados considerados como “los más importantes” en ambos caso.
La presente denuncia se hace debido a que, caso de ser cierta la información que nos han proporcionado, el Fiscal General de la República, Raul Melara, no forma parte de lo que sus subalternos están fraguando.
De acuerdo a la información proporcionada al medio digital DiarioLatino.net, en horas de la mañana, en un restaurante de comida rápida en el Centro Comercial “La Joya”, se reunieron, junto a “G” (German) Arriaza, Will Walter Ruiz Ponce, Máx Muñoz Menjivar, Mario Ricardo Calderón Castillo, Pedro Cruz, Víctor Loucel, Mario Antonio Huezo, Froilán Cotto Cabrera y Sandra Yanira Salazar Sorto, además de los fiscales Jorge Cortez y Víctor García Corpeño.
Los mencionados fueron integrantes del grupo o círculo de influencias, con los que el ex fiscal Douglas Meléndez, “armó” los casos Rais-Martínez y Corruptela.
Hay declaraciones de por lo menos dos empleados administrativos y cuatro fiscales, quienes reconocieron en sede fiscal y sede judicial, haber sido “obligados” por Douglas Meléndez a declarar sobre hechos falsos que nunca ocurrieron para afectar a los involucrados en dichos procesos.
La fuente asegura que, entre otros temas, como si se tratase de una Fiscalía paralela, los reunidos discutieron también un cambio de posición en el actuar de la FGR con respecto a Julio Rank y que podrían solicitar, dependiendo de cada oportunidad, cambios en la acción fiscal en los delitos de los casos relevantes (fabricados) y que se contemplan en el art. 331 procesal y leyes especiales.