El presidente Nayib Bukele publico el lunes en redes sociales que proseguirán, a pesar de las críticas de expertos historiadores, con las acciones de renovación del Centro Histórico de San Salvador.
Los trabajos seguirán «contra viento y marea», escribió el mandatario en la red social X.
Expertos aseguran que los trabajos en el Palacio Nacional han dañado «irreversiblemente» ese patrimonio, una emblemática edificación que sufre un proceso de restauración caprichoso y sin consultar a arquitectos y expertos historiadores, junto al Teatro Nacional.
El historiador e investigador Carlos Cañas Dinarte, dijo “es irreversible la destrucción que están realizando en la infraestructura del Palacio».
«El Palacio Nacional ha perdido hoy parte de sus valores culturales: de antigüedad, estético-arquitectónico y de autenticidad, los cuales se habían conservado intactos en el tiempo, haciéndolo uno de nuestros más y mejores exponentes de nuestra arquitectura de inicio del siglo XX», indica.
Ante las críticas, Bukele aseguró que «ya estamos acostumbrados, trabajamos mejor así…».
Las baldosas del primer nivel del Palacio Nacional han sido destrozadas ante el silencio del Ministerio de Cultura. Las baldosas fueron importadas desde Italia a principios de los años 1900, junto con lámparas tipo araña de cristal y otras ornamentaciones elaboradas en mármol de Carrara; se desconoce si dichos ornamentos también han sido destruidos para dar paso al «gusto» del actual gobernante.
“Ni sé qué decir, y me quedo esperando excusas. Con lo que se oye últimamente, pueden ser desde el pueblo se los ordenó, a que el rey necesita un palacio a su gusto”, dijo en la red X el escritor y periodista salvadoreño Elmer Menjívar.
