Los abogados del empresario salvadoreño Enrique Rais, dijeron este martes que las nuevas acciones penales que intenta la Fiscalía en contra de su cliente constituyen acoso y sed de venganza por parte del ex fiscal Douglas Meléndez.
Los profesionales advirtieron que Meléndez tuvo que recurrir a un auxiliar de su confianza para que firmase el requerimiento judicial contra Rais, ante la negativa de otros fiscales.
Según la defensa de Rais, Meléndez aprovechó el último día de su gestión para organizar una serie de acciones contra su defendido en venganza por considerar que las denuncias hechas por el empresario respecto a supuestas ilegalidades y violaciones al debido proceso y a la constitución, cometidas en el caso Rais Martínez, fueron la causa principal para que no fuera reelecto en el cargo.
Según los nuevos cargos formulados contra Rais, este debería responder por una serie de acusaciones sobre hechos que ya fueron ventilados en otros tribuales y otras instancias en lo que se conoce como doble juzgamiento.
Para los efectos, el ex fiscal Douglas Meléndez tuvo que recurrir a un auxiliar de su confianza quien supuestamente es familiar de la fiscal adjunta en virtud de que los fiscales que han venido representado al Ministerio Público en las acusaciones contra Rais, se encuentran inhibidos de hacerlo debido a que se encuentran ,( la mayoría), en calidad de imputados por haber “fabricado” pruebas y a la espera de que el próximo 18 se de a conocer sin serán procesados o sobreseídos como lo solicitó el mismo Fiscal Meléndez.
La nueva acusación contra Rais es por el supuesto cargo de haber manipulado pruebas en contra de sus exsocios canadienses Matteo Pasquale y Franco Pacetti, a quienes acusó de haberlo extorsionado con las acciones de la empresa Manejo Integral de Desechos Sólidos S. E. M. de C. V. (MIDES), que procesa los desechos sólidos de varias municipalidades, situaciones que ya fueron resuelta por los tribunales.
El requerimiento fue presentado el pasado domingo en el Juzgado Octavo de Paz contra Rais, su sobrino Hugo Blanco Rais y dos de sus abogados, Wilfredo Ernesto Gutiérrez y Héctor Grimaldi Membreño. quien se encuentra detenido.
El argumento de la FGR está fundado exclusivamente en el testimonio de la testigo criteriada clave Grecia quien le contó a los fiscales que el abogado Grimaldi la contactó para realizar pruebas psicológicas supuestamente para favorecer a Rais y su sobrino, en calidad de víctimas., después de que supuestamente fueron agredidos por el abogado Mario Calderón y su esposa. Grecia asegura haber recibido soborno para falsificar ese peritaje.
El caso se remonta a 2005, cuando el 18 de febrero de ese año la empresa de los canadienses, Cintec International, vendió a la empresa panameña de Rais, Inversiones y Servicios del Istmo, todas las acciones de la empresa TRADESAL. Esta última sociedad era la propietaria del 90 % de las acciones de MIDES. El acuerdo se dio por un total de $11 millones más una tasa del 13 % anual.
Tras el acuerdo comercial, Rais denunció y demostró cómo Pasquale y Pacetti trataban de extorsionarle exigiendo más del monto acordado por la empresa.
Para este día está programada la audiencia con la sola presencia de Grimaldi quien fue detenido el pasado domingo.
Según distintos profesionales del derecho, el requerimiento contra Rais, firmado por el sobrino de la fiscal adjunta Noris Marlene Flores, Jairo Elenilson Flores,constituye un caso de acoso en contra del empresario Rais.
Según se dijo, Jairo Elenilson Flores estaba desempeñando sus labores en la sede de la Fiscalía de Cojutepeque, pero recientemente fue ascendido y trasladado a la central en noviembre.
De acuerdo con la información, ninguno de los fiscales que han estado vinculados al caso Rais Martínez, quiso firmar el nuevo requerimiento contra, por lo que, en un nuevo caso de nepotismo, supuestamente trajeron al sobrino de la fiscal adjunta y él firmó el nuevo documento presentado contra el empresario.
“La denuncia fue firmada el último día del fiscal pasado; es decir, Douglas Meléndez. Ninguno de los fiscales quiso firmar el nuevo requerimiento, por lo que supuestamente trajeron al sobrino de la fiscal adjunta y él la firmó. Él estaba en Cojutepeque y lo ascendieron en lo que sería otro caso nepotismo, pues ella es su comadre y este es el sobrino de ella”, manifestó uno de los abogados que fueron consultados.