Ante la insistencia del régimen de Nicolás Maduro en que no se llevará a cabo el referéndum revocatorio contra el presidente venezolano, el bloque opositor de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) aseguró que la consulta popular dependerá de la “presión” que ejerza la sociedad sobre las autoridades chavistas.
“Hay un Poder Electoral que, en teoría, es autónomo e independiente, a ese Poder Electoral es al que hay que obligar a que cumpla con su deber de ratificar el derecho del pueblo al referéndum”, señaló el opositor Carlos Ocariz, vocero de la MUD.
El alcalde del municipio Sucre de Caracas advirtió que la MUD seguirá presionando con manifestaciones en las calles contra el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Ocariz hizo referencia al intento del chavismo de bloquear el referéndum revocatorio contra Maduro, pero sostuvo que el desarrollo de la consulta no dependerá del Ejecutivo, sino que “depende del pueblo”.
“Depende del pueblo con la presión popular, depende del pueblo con la organización popular de manera pacífica para lograr que los poderes públicos funcionen”, indicó.
El chavismo apuntó en reiteradas ocasiones que la oposición no podrá solicitar el referéndum, con el que buscan recortar el mandato de Maduro, porque sostiene que no cuentan con el tiempo suficiente para que los plazos de la solicitud se den este mismo año.
Además, el Ejecutivo asegura que las firmas recolectadas por la oposición serían fraudulentas.
El régimen venezolano afirma que se requieren 243 días para cumplir con el cronograma de un proceso revocatorio, lo que excede la cantidad de días que restan de este año, por lo que de concretarse, el referéndum se haría en el primer trimestre de 2017.
La ley establece que si el jefe de Estado es revocado en la mitad de su mandato –momento en el que se encuentra Maduro ahora–, las autoridades deberán convocar a nuevas elecciones, pero si el cese ocurre en los dos últimos años de su gobierno, será sustituido por su vicepresidente, que concluiría el período –en este caso– en 2019.
